Según el diccionario de lengua castellana, la memoria es la facultad de la mente que permite retener hechos pasados, mientras que la histeria es un estado pasajero de excitación nerviosa.
Aclarado los términos a los que nos referimos; cierta junta de gobierno carece de memoria (ó se acuerda de lo que quiere), y excede de histeria.
No se acuerda -por ejemplo- de alguna familia que acogió en su domicilio familiar un titular de su Hermandad como uno más, cuando éste no tenía dónde recibir culto.
No se acuerda -por ejemplo- de la persona que abanderó el proyecto de un paso de misterio nuevo que hoy ya es casi realidad.
No se acuerda -por ejemplo- de los hermanos fundadores que, con mucho cariño, construyeron piedra a piedra una Hermandad que llegó a ser muy grande en fondo y en formas, y poco a poco está dejando de serlo.
No se acuerda -por ejemplo- de aquellos jóvenes que fueron referente de otros tantos, apasionados cofrades, desvividos por la hermandad... pioneros de grupos jóvenes y para los cuáles es un halago haber sido llamados "niñatos".
No se acuerda -por ejemplo- de personas, que no exceden dedos en la mano para contarlas, que se pegaron viajes y viajes hacia el sur para traerle lo mejor a su Reina y a su Jefe, sin luego pedir cuentas económicas a la Hermandad.
No se acuerda de nada de lo citado esta Junta de Gobierno. Sólo se dedica a mirarse el ombligo y a ponerse la medalla ella misma cuál si de José Bono cualquiera se tratase. La verdad es que es difícil que se acuerde cuando gran parte de las personas que forman esta Junta llevan tres días en la cofradía.
En fin, creo que lo que deberían hacer es aprenderse un dicho muy castizo que versa así:
Aclarado los términos a los que nos referimos; cierta junta de gobierno carece de memoria (ó se acuerda de lo que quiere), y excede de histeria.
No se acuerda -por ejemplo- de alguna familia que acogió en su domicilio familiar un titular de su Hermandad como uno más, cuando éste no tenía dónde recibir culto.
No se acuerda -por ejemplo- de la persona que abanderó el proyecto de un paso de misterio nuevo que hoy ya es casi realidad.
No se acuerda -por ejemplo- de los hermanos fundadores que, con mucho cariño, construyeron piedra a piedra una Hermandad que llegó a ser muy grande en fondo y en formas, y poco a poco está dejando de serlo.
No se acuerda -por ejemplo- de aquellos jóvenes que fueron referente de otros tantos, apasionados cofrades, desvividos por la hermandad... pioneros de grupos jóvenes y para los cuáles es un halago haber sido llamados "niñatos".
No se acuerda -por ejemplo- de personas, que no exceden dedos en la mano para contarlas, que se pegaron viajes y viajes hacia el sur para traerle lo mejor a su Reina y a su Jefe, sin luego pedir cuentas económicas a la Hermandad.
No se acuerda de nada de lo citado esta Junta de Gobierno. Sólo se dedica a mirarse el ombligo y a ponerse la medalla ella misma cuál si de José Bono cualquiera se tratase. La verdad es que es difícil que se acuerde cuando gran parte de las personas que forman esta Junta llevan tres días en la cofradía.
En fin, creo que lo que deberían hacer es aprenderse un dicho muy castizo que versa así:
No hay comentarios :
Publicar un comentario