Cuando Ella quiera, y a la salud no le tenga tanto miedo, dejaré de soñar con ese sentimiento Perchelero, para disfrutar, aunque sea un ratito, de un paseo grande por mi barrio, que tanto me ha hecho amar estas Santas tradiciones y a esta advocacion de la Madre de Dios, a la que tantas veces le he rezado.
Dios Te Salve Madre del Perchel, ampara bajo tus andas a tanta Gente Buena.
Hágase realidad el sueño...!! Ya queda menos!!
ResponderEliminar