Cuenta la leyenda que hace ya muchos años durante una de esas Semana Santas de mediados de Abril hacia un calor en Sevilla... Era Miércoles Santo y desde el Nervión la cofradia de la Sed sufría lo indecible dada la climatologia adversa unido a su largo recorrido en tiempo y distancias. Cuentan que uno de los costaleros estaba extasiado con el calor reinante que se hacia más resente si cabe debajo del paso. Todos sus compañeros insistian en que bebiera agua a lo que él les respondía: "Mientras no beba el de arriba, yo no bebo" Tal era la situación y el estado de dicho costalero, que el Diputado Mayor de Gobierno conjuntamente con el Hermano Mayor decidieron parar el paso y llamar al "tio de la escalera" y al "aguaor". EL aguaor subió por la escalera y con su propio pañuelo mojo los labios del Señor de la Sed, que dejaron una huella indeleble en el lienzo. Cuentan... que desde aquel dia el costalero en cuestión guardo en su casa -como oro en paño- dicho pañuelo con las marcas de los labios del Señor.
Cuenta la leyenda que hace ya muchos años durante una de esas Semana Santas de mediados de Abril hacia un calor en Sevilla...
ResponderEliminarEra Miércoles Santo y desde el Nervión la cofradia de la Sed sufría lo indecible dada la climatologia adversa unido a su largo recorrido en tiempo y distancias.
Cuentan que uno de los costaleros estaba extasiado con el calor reinante que se hacia más resente si cabe debajo del paso.
Todos sus compañeros insistian en que bebiera agua a lo que él les respondía: "Mientras no beba el de arriba, yo no bebo"
Tal era la situación y el estado de dicho costalero, que el Diputado Mayor de Gobierno conjuntamente con el Hermano Mayor decidieron parar el paso y llamar al "tio de la escalera" y al "aguaor".
EL aguaor subió por la escalera y con su propio pañuelo mojo los labios del Señor de la Sed, que dejaron una huella indeleble en el lienzo.
Cuentan... que desde aquel dia el costalero en cuestión guardo en su casa -como oro en paño- dicho pañuelo con las marcas de los labios del Señor.
Espero os haya gustado la leyenda
Emocionante la leyenda..
ResponderEliminarY el costalero bebió agua...
ResponderEliminarSaludos
Antonio